Córdoba: habrá pruebas a policías que presenten síntomas de consumo de drogas
La preocupación parecía estar latente, y de alguna forma las autoridades le buscan una solución.
Desde este jueves, la Provincia tiene un "Protocolo de Control de Drogas para el Personal de la Policía de la Provincia de Córdoba".
En los últimos tiempos, las detenciones a efectivos por diversos hechos se había multiplicado, y la temática adicciones parece ser el disparador para poner el foco en la formación de los efectivos que custodian las calles.
En qué consiste
Básicamente, la norma que lleva la firma del ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, impone la realización de “pruebas toxicológicas rutinarias y aleatorias que permitan detectar y prevenir el consumo de drogas entre los integrantes de la Fuerza, utilizando dispositivos de última generación”, adquiridos por la Dirección General de Control de Conducta Policial.
En Córdoba se cumplió con la adquisición de "equipos comúnmente denominados "Sistemas de Pruebas Móviles", que permitirán realizar los exámenes en cualquier lugar.
Se dio a conocer que será obligatorio un “examen complementario de presencia de metabolitos de drogas psicotrópicas ilegales, para todo el personal superior y subalterno de los distintos cuerpos y grados de la Policía de la Provincia de Córdoba que esté en condiciones de promocionar a la jerarquía inmediata superior”.
A su vez, se cumplirá en las pruebas de ingreso a la fuerza y de ser necesario ante un “incidente o accidente” del que participe un efectivo.
Pero también se tipica que tendrá lugar ante una “sospecha razonable” en el personal, ya sea “en actividad o retirado, de civil o uniformado, que presente síntomas manifiestos del consumo de sustancias estupefacientes durante la prestación del servicio policial o de franco, en este último caso cuando haya trascendencia pública y comprometa el decoro institucional”.
Se busca, así, “garantizar la seguridad pública y mantener la integridad y profesionalismo de la fuerza policial”.
Se deja constancia que, ante un caso positivo, se procederá a procesos previstos, que incluyen “la rehabilitación, la reinserción o la desvinculación laboral del individuo”.
El protocolo prevé criterios para la Realización de Pruebas:
– Pruebas aleatorias: Selección del personal mediante un sistema aleatorio para
garantizar imparcialidad y prevenir conductas inapropiadas.
– Pruebas por sospecha razonable: Realización de pruebas cuando existan
indicios razonables para sospechar que un personal policial está bajo la influencia
de drogas.
– Pruebas post-incidentes o accidentes: Aplicación de pruebas tras incidentes
críticos o accidentes durante el servicio.
– Pruebas de ingreso: Evaluación de todos los candidatos durante el proceso de
selección antes de ser admitidos en la fuerza.