Así protegerá la F1 a sus pilotos del calor extremo en 2025

El calor extremo en la Fórmula 1 ha sido un tema recurrente en los últimos años, especialmente en competiciones como el Gran Premio de Singapur o el de Qatar, donde las altas temperaturas han puesto en peligro la salud de los pilotos. A partir de 2025, la FIA implementará una nueva normativa que exige el uso de un sistema de refrigeración diseñado específicamente para proteger a los conductores en condiciones de calor extremo.

Este dispositivo, desarrollado por la empresa estadounidense Chillout Motorsport, estará presente en todas las carreras en las que se prevea una temperatura ambiente superior a los 30.5 grados Celsius. En estas circunstancias, el calor dentro del monoplaza puede superar los 50 grados, lo que aumenta el riesgo de golpes de calor y fatiga extrema para los pilotos, que deben rendir al máximo en estas condiciones. La nueva tecnología se basa en un sistema de refrigeración que consta de un micro compresor, un evaporador y una unidad de condensación, conectados a una camiseta interior con tubos refrigerados cosidos. Estos tubos se ubican alrededor del pecho y la espalda del piloto, reduciendo su temperatura corporal hasta 4.4 grados.

Un dispositivo cómodo y efectivo

El sistema, que pesa unos 5 kilos, fue probado con éxito durante la temporada 2024 por pilotos como Fernando Alonso y Charles Leclerc, quienes lo usaron durante el Gran Premio de México. Según Leclerc, el sistema fue efectivo y cómodo, y no interfirió en la conducción, lo que demuestra su potencial para ser implementado de forma exitosa en el campeonato de F1.

Para compensar el peso adicional que el sistema de refrigeración implica, la FIA permitirá un incremento en el límite de peso de los monoplazas, que pasará de 800 a 805 kilos. Esta modificación, que asegura que los monoplazas puedan seguir cumpliendo con los estándares de rendimiento, permite la integración del sistema sin comprometer la competitividad. Los equipos también podrán personalizar la solución de refrigeración, utilizando aire, agua o productos químicos para mejorar la conductividad térmica, siempre que cumpla con las especificaciones técnicas establecidas por la FIA.

Medida en respuesta a situaciones críticas

La introducción de este sistema responde a la creciente preocupación por la seguridad de los pilotos durante las pruebas más calurosas. En el pasado, se habían usado soluciones improvisadas, como chalecos de hielo o baños fríos tras las carreras, pero estas medidas resultaban insuficientes para mitigar el impacto del calor extremo en el rendimiento y la salud de los pilotos.

Uno de los eventos más emblemáticos que impulsó la creación de esta normativa fue el Gran Premio de Qatar 2023, donde varios pilotos experimentaron graves problemas de salud. El estadounidense Logan Sargeant, por ejemplo, sufrió un golpe de calor y tuvo que abandonar la carrera, mientras que Esteban Ocon y Lance Stroll tuvieron episodios de desmayo y malestar severo tras cruzar la línea de llegada.

Ajustes para el futuro

Aunque algunos pilotos, como Lewis Hamilton, han manifestado que estas situaciones extremas son parte del desafío de la Fórmula 1, la FIA ha decidido priorizar la salud y seguridad de los pilotos, sin comprometer la esencia competitiva del deporte. En palabras de Hamilton, “somos atletas, y debemos estar preparados para estas condiciones”, aunque aceptó que la medida tiene sentido para reducir riesgos sin perjudicar el espectáculo.

La implementación de este sistema marca una diferencia respecto a otras competiciones de motor como el Dakar o Le Mans, que ya utilizan sistemas de aire acondicionado en sus vehículos. En la Fórmula 1, donde cada gramo cuenta, la adopción de este sistema representa un reto técnico, pero el dispositivo de Chillout Motorsport ha demostrado ser eficaz sin interferir en el rendimiento de los monoplazas.

Con miras al futuro, la introducción de este sistema de refrigeración podría evolucionar aún más, especialmente con la llegada de los monoplazas más eléctricos previstos para 2026. La posibilidad de integrar este tipo de tecnologías de manera más eficiente es una de las apuestas de la F1 en su constante búsqueda de avances tecnológicos. Además, Chillout Motorsport, con experiencia en competiciones como NASCAR, WEC y la Fórmula E, se perfila como líder en el desarrollo de soluciones de refrigeración de alto rendimiento, que también se emplean en sectores como la aviación y los trajes espaciales.