Nasser Al-Attiyah celebra su victoria en la etapa 9 y se prepara para el desafío final contra Yazeed Al-Rajhi
Nasser Al-Attiyah se alzó con la victoria en la novena etapa del Rally Dakar, un recorrido de 357 kilómetros cronometrados y 232 de enlace entre Riad y Haradh, justo antes de llegar a las desafiantes dunas del Empty Quarter. Con esta victoria, el multicampeón qatarí no solo celebró su sexta victoria parcial en el Dakar, sino que también ofreció el primer triunfo a Dacia, la marca rumana que se incorporó al Grupo Renault en 1999.
El triunfo de Al-Attiyah llega en un momento crucial de la competencia, cuando la lucha por el título general entra en su fase final. A 25 minutos y 21 segundos de desventaja frente al líder Yazeed Al-Rajhi, el piloto de Toyota del equipo Overdrive Racing, Al-Attiyah se prepara para un duelo de poder regional: qataríes contra sauditas. A pesar de la diferencia, el qatarí mantiene viva su esperanza de alcanzar la cima, confiando en su habilidad en la arena y en su instinto de supervivencia.
Al-Attiyah, quien ha ganado el Dakar con Volkswagen, Mini y Toyota, se enfrenta ahora al reto de conquistar su sexta victoria global, algo que lo convertiría en el primer piloto en ganar con un proyecto recién estrenado. En su entrevista post-etapa, el piloto se mostró determinado: "Todo depende de este miércoles. Sé que soy bueno en la arena; solo tenemos que ser fuertes", comentó, enfatizando que su estrategia se centrará en los rivales más cercanos, desestimando a los que se encuentran más atrás en la clasificación.
El vacío dejado por el sudafricano Hanek Lategan, quien sufrió un pinchazo en la octava etapa, dejó a Al-Rajhi al frente de la clasificación general. Sin embargo, Al-Attiyah confía en su capacidad para recortar la diferencia en los próximos tramos. En cuanto a su propio rendimiento, Al-Attiyah se mostró optimista: "Voy a luchar para lograr el récord y por ganar la carrera, porque espero ganar el título: soy el mejor", aseguró, subrayando que no levantará el pie del acelerador.
La competencia se adentra en su fase más difícil, con las imponentes dunas del Empty Quarter como escenario decisivo. Al-Attiyah se prepara para lo que podría ser un asalto final por el título, mientras el mundo del Dakar observa atentamente el desenlace de una de las ediciones más emocionantes de los últimos años.