Provinciales

Falleció Omar el Negro Palma, gloria y emblema de Rosario Central

Omar Arnaldo Palma, gloria y emblema de Rosario Central, murió este lunes por la noche a causa del accidente cerebrovascular hemorrágico que había sufrido el 30 de setiembre por la mañana, mientras tomaba mates junto a su familia en Ibarlucea. Estuvo internado durante una semana en la terapia intensiva del hospital Italiano de Rosario. La ciudad y el club de Arroyito, de luto, despiden a uno de sus más grandes ídolos deportivos.

Su muerte fue confirmada este martes por la mañana por el equipo de comunicación del Hospital Italiano donde permanecía internado desde el pasado 30 de septiembre. Minutos después, desde la cuenta oficial de Rosario Central lamentaron el fallecimiento "Acompañamos en este duro momento a la familia del Negro y a todo el pueblo canalla que despide a uno de nuestros máximos referentes históricos", publicaron.

"Omar falleció en la noche de ayer, ya venía con un cuadro bastante complicado de los días previos y a partir de las 21 se declaró la muerte encefálica. Hemos sido bastante reservados por el momento doloroso que pasa la familia y gran parte del momento doloroso que lo apreciaba mucho", detalló, Jorge Ignacio Moreno, director del Italiano.

Palma fue el jugador más ganador en la historia de Central. Logró tres campeonatos en Primera: el Nacional 1980, el Torneo de Primera División1986/87 y la Copa Conmebol en 1995, además del ascenso a la máxima categoría en 1985. En los partidos claves y definitorios siempre convirtió goles.

Tuvo tres ciclos como futbolista en Central: 1979-85, 1986-87 y 1992-98. Disputó 390 partidos (352 como titular y 38 desde el banco) y es el tercer jugador con más presencias en la historia del club detrás de Jorge José González (521 encuentros) y Alfredo Fogel (423). Hizo 64 goles (52 en la “A”, 10 en la “B” y 2 en la Copa Conmebol 1995).

Un diez talentoso con un panorama de juego que todavía está grabado en la retina de los hinchas canallas. Llevó su fútbol a Colón de Santa Fe en una breve estadía a préstamo. También tuvo un paso por River Plate, donde quedó en la memoria colectiva por un gol que le metió a Boca en el cierre de un Superclásico frenético, donde hubo dos penales fallados. Y en Veracruz de México, antes de su regreso definitivo a Rosario.

Nacido el 12 de abril de 1958 en Campo Largo, Chaco, Palma se mudó a Rosario a los diez años. Venía de un pueblito chaqueño de hacheros y campesinos a 40 kilómetros al sur de Presidencia Roque Sáenz Peña, al borde del bosque impenetrable.

Primero se había trasladado a Rosario su padre, Don Gerónimo, porque había conseguido trabajo en la Municipalidad. Luego de los primeros años en la villa de Empalme Graneros, los Palma se mudaron a barrio Sarmiento –a pocas cuadras del Gigante de Arroyito–.

“Cuando llegué veía que todos los chicos andaban con la camiseta de Central y ya me empezó a interesar y a gustar los colores –confía su primera impresión–. Y cuando tenía 9 años, los amigos del barrio me dijeron que íbamos a ir a ver la práctica de Central. Ahí me empezó a gustar Central”, contó Omar Arnaldo en una nota con El Gráfico.

A las inferiores canallas llegó con 13 años. Rápidamente se destacó por su técnica depurada, su visión de juego y su capacidad para ejecutar tiros libres. Pero los comienzos no fueron nada fáciles para ese pibe bajito y flaco.

Su debut en la Primera División fue el 21 de octubre de 1979 en la octava fecha del Campeonato Nacional. Ese día Rosario Central y Boca Juniors empataron 1 a 1 en un encuentro disputado en el estadio Gigante de Arroyito. El entrenador que lo hizo debutar fue Ángel Tulio Zof. En ese torneo, jugó 2 partidos y no convirtió goles. Durante el torneo Metropolitano del año siguiente, tuvo más continuidad pero no logró afianzarse como titular: jugó sólo 9 partidos.

Palma ganó su primer título de Primera con el club de Arroyito en el Nacional de 1980. En el encuentro de ida de la final de aquel torneo, el Negro señaló el segundo gol del equipo canalla frente a Racing de Córdoba. Aquella noche, Central derrotó a los cordobeses por 5 a 1 en el Gigante. En el juego de vuelta Palma fue titular nuevamente, y la caída por 2 a 0 ante el conjunto de La Docta no impidió la vuelta olímpica de los auriazules. En ese campeonato, disputó 7 encuentros y señaló un gol.

Luego del descenso sufrido en 1984, fue parte del plantel que logró el ascenso a la Primera División en 1985 de la mano del entrenador Pedro Marchetta. En el torneo de Primera B de ese año, el "Negro" anotó 10 goles: dos a Nueva Chicago y a All Boys, y uno a Quilmes Athletic Club, Deportivo Morón, El Porvenir, Club Atlético Banfield, Villa Dálmine y Sarmiento de Junín.

De enero a junio de 1986 pasó a préstamo a Colón de Santa Fe. Esto se produjo debido a que el fútbol argentino sufrió una gran reestructuración en sus calendarios, ya que todos los campeonatos organizados por la Asociación del Fútbol Argentino pasaron a disputarse desde junio a fines de mayo, a diferencia del sistema del "año calendario" que se venía implementando.

En julio de 1986 volvió a Central, según estaba convenido, y fue una de las piezas titulares en el equipo dirigido una vez más por Ángel Tulio Zof, que salió campeón del torneo de Primera División de la temporada 1986/1987. Palma resultó ser el goleador máximo del certamen, con 20 tantos señalados en 38 encuentros. Fue el encargado de patear el penal en la última fecha ante Temperley para establecer el 1 a 1 final que le dio el título a su equipo.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba
Cerrar
Cerrar